El Boletín Oficial del Estado ha publicado los planes formativos de las especialidades de enfermería familiar y comunitaria y de enfermería pediátrica. Estos programas establecen las bases fundamentales en los que se tiene que basar la formación de estos especialistas como la duración de la residencia, los objetivos y las competencias que se han de adquirir.
Una vez aprobados estos programas, las comunidades autónomas tendrán que crear unidades docentes en sus hospitales y centros sanitarios porque las enfermeras que accedan a estas especialidades puedan llevar a cabo su periodo de formación de dos años como residentes, después de haber superado una prueba.
Enfermería pediátrica
El nuevo programa formativo de enfermería pediátrica enten que la enfermera de esta especialidad es "la profesional capacitada para proporcionar atenciones enfermeras especializadas de manera autónoma, durante la infancia y la adolescencia, en todos los niveles de atención, incluyendo la promoción de la salud, la prevención de la enfermedad y la atención al neonato, niño, adolescente sano o enfermo y su rehabilitación, en un equipo multiprofessional y en colaboración con enfermeras especialistas en de otras áreas".
Este plan también establece que esta enfermera "ejercerá el liderazgo en el ámbito de la cura del neonato, niño y adolescente, sano y con procesos patológicos agudos, crónicos o discapacitants" y estará "capacitada para planificar, ejecutar y evaluar programas de salud relacionados con su especialidad y desarrollar trabajos d?investigación y docencia para mejorar la calidad de los servicios".
Enfermería familiar y comunitaria
En el caso de la especialidad de enfermería familiar y comunitaria, el plan formativo señala que su objetivo es "la participación profesional en la cura compartida de la salud de las personas, las families y las comunidades, en el continuum de su ciclo vital en los diversos aspectos de promoción de la salud, prevención de la enfermedad, recuperación y rehabilitación, en su entorno y contexto sociocultural".
Entre las competencias que habrá que adquir se incluyen el hecho de identificar las necesidades de salud de la población y proporcionar una respuesta correcta desde las curas a las personas que lo necesiten y desde el varios ámbitos, establecer y dirigir redes centinela de epidemiología de las curas, responder a las necesidades de personas con enfermedades crónicas o con situaciones de fragilidad y con riesgo de enfermar.
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