Tenemos que cambiar la educación? La formación universitaria puede ser prescindible? La función docente mantendrá su importancia y peso? Estas son algunas de las preguntas que Xavier Aragay del Reimagine Education Lab, consultor y speaker especializado en el cambio de la educación, planteó durante el VII Café de Innovación a los profesores del Campus.
El propósito de la sesión no era resolver estas incógnitas, demasiado complejas para tratarlas en un par de horas, sino plantearlas en la mente de los asistentes y hacerlos reflexionar sobre el sistema educativo actual.
Actualmente, buena parte de los docente del Campus son más o menos conscientes de la necesidad de un cambio en la educación universitaria. Por este motivo ya han empezado a verse ciertos cambios en las aulas. Algunas asignaturas se han lanzado a la complicada tarea de evaluar por competencias o de guiar los estudiantes hacia el trabajo por proyectos.
Pero para que esta transformación se consolide tiene que ir acompañada de un cambio en las personas, los espacios, las estructuras, los equipos, las instituciones, etc.
Nuestro sistema educativo nació a finales del siglo XIX y estaba pensado por una sociedad completamente diferente de la que ahora vivimos. De esto hace más de ciento años, pero el modelo no ha cambiado y esta situación ha llevado a una crisis educativa. “No es una crisis de país, sino una crisis sistémica” comentó Xavier Aragay durante la sesión. Continuamos llevando a cabo un modelo de clases donde el profesor hace la función de sabio y transmite el conocimiento. Los estudiantes, que damos por supuesto que no saben mucho, escuchan y después ponen por escrito lo que han aprendido en un examen al que el sabio pone nota.
Pero, formamos a los estudiantes para un puesto de trabajo, para una profesión en sentido amplio o para que puedan abrirse camino en el mundo que vendrá? De verdad el envejecido modelo actual de educación puede dar acogida a las necesidades de los estudiantes del siglo XXI? Cómo imaginamos que serán los hospitales del 2040? Si formamos a los estudiantes para la situación actual, que harán en unos años, cuando este mundo haya desaparecido completamente?
Estas son algunas de las preguntas e ideas que transmitió Xavier Aragay durante su presentación. Si queremos innovar en el mundo educativo y avanzar, hay que apostar por un nuevo modelo que cubra las necesidades del siglo XXI.